Tanto los cultivadores experimentados como los novatos se preguntan a menudo: «¿Por qué la buganvilla no florece muy abundantemente?». ¿Por qué surge esta pregunta tanto de los cultivadores experimentados como de los novatos? Es fácil. Hay que entender en qué consiste esta belleza y las condiciones en las que se mantiene.
Descripción de la planta
La buganvilla es un arbusto ornamental de hoja perenne de la familia Nyctaginus. También se le conoce como el árbol del papel. Esto se debe a que sus brillantes brácteas, que mucha gente confunde con flores, se asemejan a una hoja de pergamino transparente y arrugada.
La planta debe su nombre al navegante francés Louis Antoine de Bougainville, que descubrió esta flor maravillosa. Es originaria de Brasil, con sus trópicos y subtrópicos húmedos. En la actualidad, existen 14 especies en estado salvaje.
La buganvilla tiene un aspecto exótico y por ello atrae la atención de los floristas. Es principalmente un arbusto, con ramas en forma de lianas, que alcanza una longitud de unos 5 – ty m. También hay plantas arbóreas con troncos leñosos y ramas formadas.
La buganvilla se caracteriza por la presencia de espinas a lo largo de las vides o ramas. Las flores también son llamativas, con sus discretas inflorescencias tubulares de color beige rodeadas de brillantes hojas modificadas, las brácteas. En la naturaleza, los arbustos son principalmente de color rosa brillante en varios tonos. Las variedades híbridas son blancas, rosas, rojas y mixtas.
La especie buganvilla lisa, un arbusto compacto, se utiliza para el cultivo en pisos. En nuestro clima, es principalmente una planta de invernadero o de interior, pero también hay ejemplares de jardín.
Condiciones para una floración abundante
La buganvilla sólo puede florecer en casa si se respetan ciertas normas y condiciones.
Régimen de riego
El riego es un factor importante. Durante el período de crecimiento activo y de brotación, es esencial el riego abundante con agua caliente (+20…+25 grados Celsius), previamente destilada. El agua fría dañará el sistema radicular y la planta puede dejar caer activamente sus hojas y negarse a producir tallos florales.
El exceso de humedad es igualmente perjudicial, ya que las raíces no pueden absorber la humedad a tiempo y el agua estancada en el sumidero puede tener consecuencias irreparables. La planta comenzará a pudrirse y las hojas se volverán amarillas y se caerán y las ramas se volverán excesivamente robustas.
El secado del suelo también es perjudicial para la floración. Esto conduce a una ruptura de los procesos metabólicos y a la muerte. Asegúrese de que la tierra se seca unos centímetros entre los riegos. Si la tierra se ha secado 2-3 cm, se debe realizar el siguiente riego. Durante el periodo de descanso e hibernación, el procedimiento debe ser mínimo para no matar la planta. Riegue la planta en verano con agua a temperatura ambiente. Es preferible hacerlo por la mañana para que el arbusto haya tenido tiempo de secarse al final del día.
Rango de temperatura
Dado que el arbusto procede de los trópicos húmedos y cálidos, el control de la temperatura es importante para el éxito del crecimiento y la formación de las yemas florales. La buganvilla no tolera las corrientes de aire ni los cambios bruscos de ubicación. Las temperaturas favorables para las buganvillas se sitúan entre los 25 y los 30 grados centígrados. Por supuesto, la humedad también debe ser adecuada en condiciones sostenidas.
El aire seco y caliente de la calefacción durante los meses de invierno también es perjudicial para el arbusto. En invierno, la buganvilla comienza su periodo de descanso y debe trasladarse a una habitación donde el termómetro marque entre 12 y 15 grados centígrados.
Esta diferencia se debe a que las hojas comienzan a caer activamente y los nuevos brotes y yemas florales empiezan a formarse a principios de la primavera. Se trata de un proceso completamente natural. Pero conviene recordar que si la temperatura desciende por debajo de esta cifra, se producirá una muerte inminente.
Para que el arbusto pueda florecer y disfrutar de su belleza, hay que darle un lugar especial en la casa. El hecho es que la buganvilla es muy caprichosa en este asunto y no le gusta viajar constantemente de un lugar a otro. Por esta razón, al traer una nueva mascota a la casa, conviene determinar de inmediato un lugar para ella. El arbusto debe plantarse en ventanas orientadas al sur o al oeste con mucha luz. La flor no teme al sol, por lo que en la naturaleza crece en laderas al aire libre y sin ninguna sombra. El brillo de las brácteas depende de la intensidad del sol.
Importante: A las buganvillas no les gusta que se les gire alrededor de su eje para intentar dar luz a todos sus lados. Esto también tiene un efecto perjudicial en la floración.
Condiciones del suelo y de la maceta
Un factor muy importante para la floración del arbusto es la elección correcta del jarrón y la mezcla de tierra. La maceta para las buganvillas no debe ser demasiado grande. El hecho es que si lo plantas en un contenedor espacioso para cultivarlo, gastará toda su energía en llenar el sistema de raíces del cepellón. Esto dará lugar a una abundancia de nuevos brotes y masa verde, pero no a la floración.
Se sabe que las plantas florecen cuando están apiñadas y se hace todo lo posible para que florezcan abundantemente. El tamaño del jarrón debe ser un par de centímetros mayor que el anterior y lo suficientemente profundo como para producir un sistema de raíces fuerte.
De acuerdo con todas las reglas de la floricultura, la tierra debe ser confeccionada por uno mismo, pero este es un proceso complicado en algunos aspectos. También se puede comprar una mezcla universal de arbustos en una floristería.
Se aconseja a los cultivadores experimentados que añadan ingredientes sencillos:
- Humus reciclado o humus;
- arena gruesa;
- suelo del césped y del follaje.
Esto hace que el suelo sea tan ligero y permeable que tiene un efecto beneficioso para el arbusto. También se pueden añadir al suelo pequeñas cantidades de vermiculita, sustancias calcáreas y cenizas. Esto ayudará a normalizar la acidez. La buganvilla prefiere un suelo con un pH de 5,5 a 6,0.
Fertilizantes y nutrientes
Los nutrientes aplicados bajo la raíz son importantes para el éxito de la planta. Las hojas también deben ser rociadas periódicamente con fertilizante. Durante su periodo de crecimiento activo -desde principios de primavera hasta finales de otoño- necesita nutrientes como el potasio, el fósforo y el hierro. Hay que procurar que contengan la menor cantidad de nitrógeno posible. Esto puede hacer que la floración se retrase y se debilite. Alimentar cada quince días. Durante el invierno, deje de abonar y dé un descanso a la buganvilla.
A veces, las razones por las que el arbusto se niega a florecer no están claras. Pero hay una manera de animar al caprichoso arbusto a florecer. La planta debe someterse a una «dieta» especial. Déjala durante un mes aproximadamente sin abono, reduce la ración de agua y sólo humedécela cuando la tierra se haya secado por completo. En cuanto empiecen a formarse nuevos brotes con botones florales, vuelva a alimentar y regar con el régimen normal, añadiendo una pulverización con un potenciador de la floración.
Formación y poda
La poda estacional es el requisito más importante para la floración. Esto se hace tres veces al año: en primavera, verano y otoño. En primavera, se da forma al arbusto por razones sanitarias. Tras el periodo de latencia, se inspecciona el arbusto y se eliminan los brotes secos y debilitados con tijeras de jardinería. En verano, se recortan los tallos de las flores y los brotes descuidados que han perdido su calidad decorativa, formando así una nueva y hermosa corona del arbusto.
En otoño, la poda se realiza principalmente para dar forma al año siguiente. Las ramas sobrantes se recortan por completo y las principales se acortan un tercio de su longitud, según la configuración prevista.
Hay que recordar una regla importante: los brotes del año en curso deben dejarse entre 5 y 7 cm, ya que las yemas de los brotes leñosos tienen menos posibilidades de brotar y es posible que no se formen brotes jóvenes. Puedes elegir cualquier forma. A veces puede tratarse de un pequeño bonsái o de un arbusto de varios tallos. Además, se crea un efecto muy interesante utilizando un soporte, alrededor del cual se pueden envolver las largas ramas del arbusto.
Trasplante
Si la buganvilla está en condiciones óptimas, ¿por qué no florece? Hay un factor que afecta a la floración tanto como los demás. Se sabe que el trasplante
Una vez que una planta joven se trasplanta cada 1-2 años y una vez cada 3-5 años se puede trasplantar una planta madura. Sin embargo, a veces ocurre que el suelo se agota y la floración cesa por completo. Es difícil que la planta reponga su suministro de nutrientes y es posible que pierda por completo la belleza tropical.
Todas las buganvillas sufren con la replantación y en particular las adultas. La intervención, aunque sea necesaria, puede provocar una enfermedad de larga duración y la caída de las hojas.
Durante este periodo, hay que reducir la alimentación y el riego y colocar el arbusto en un lugar oscuro. Esto tiene un efecto positivo en un enraizamiento más fácil y rápido.
Plagas y control de plagas
Aunque la buganvilla es resistente a las enfermedades y los parásitos, en algunos casos es atacada por insectos chupadores. Entre ellos se encuentran los ácaros y los pulgones.
Varios o un solo factor pueden provocar la aparición de las plagas:
- Aire seco;
- atención incompleta;
- Poda inoportuna de las inflorescencias secas.
Para que esta molestia no afecte a la calidad de la floración, hay que inspeccionar cuidadosamente la planta y revisar las hojas y los tallos. Los insectos chupadores se alimentan de la savia de los brotes jóvenes, privando al arbusto de la humedad y los nutrientes vitales.
Los parásitos pueden controlarse tratando la planta con una solución jabonosa espesa o utilizando sustancias específicas. El tratamiento debe realizarse 5-6 veces hasta que los adultos y las larvas hayan desaparecido por completo.
Es importante recordar que hay que prevenir la aparición de las plagas. Mantenga las hojas limpias limpiándolas regularmente y eliminando los tallos florales poco saludables.
Si la buganvilla no florece, ¿qué puedes hacer para que sea una alegría para la vista? Hay que seguir las reglas anteriores. Si el propietario cuida bien de esta brillante belleza sudamericana, disfrutará de una floración abundante y colorida.
Mucha gente tiene miedo de tener ese «habitante» en su ventana, porque puede proliferar fuertemente y será imposible hacerle frente. Esto no es del todo cierto. El cuidado de la flor es muy sencillo. Con un poco de paciencia, un poco de imaginación y la buganvilla puede ser un verdadero punto de atracción en cualquier jardín doméstico.